Cuidados especiales para caballos

¿Qué imagen viene a tu mente cuando piensas en un caballo? La mayoría de las personas imaginan un animal vigoroso, fuerte, corriendo libre por un prado con el sol de fondo. Es decir, una de esas escenas de película ambientadas en un rancho al sur de los Estados Unidos. Sin embargo, el cuidado de caballos es más complejo de lo que parece a primera vista. Exige disponer de tiempo además de dinero.

Un caballo sano necesita cuidados más allá de un lugar para dormir, agua y comida. Son animales salvajes, habituados a convivir con otros seres de su especie en manadas, y a estar en espacios abiertos donde pueden ejercitarse el tiempo que quieran. Por esto, es necesario informarse de todos los cuidados que necesita un caballo antes de decidir quedarse con uno.

Principales cuidados de caballos

Inversión económica

Lo primero en lo que has de pensar al adquirir un caballo es si tienes la capacidad económica necesaria para sus cuidados y mantenimiento. Este animal, aparte de precisar grandes cantidades de alimento y agua, necesita muchos cuidados específicos como vacunas, revisiones y cambios de herradura, manutención de un centro hípico, seguros, materiales de higiene, equipos de calidad y visitas del veterinario cada vez que sea preciso.

Alimentación

Los caballos son animales grandes cuyo peso oscila entre 300 y 1.000 kg, por lo que es muy importante darles la cantidad de comida que cada uno necesite según su masa corporal.

Por norma general, un caballo debe comer al día un 2% de peso. Si tu caballo pesa 600 kg, necesitará comer 12 kg de comida al día. Para el correcto cuidado de un caballo éste ha de tener una alimentación a base de heno (césped, alfalfa o ambas) complementado con grano.

Alimentación de caballos

El horario de comidas debería ser siempre el mismo. Es mejor darle de comer dos o tres veces al día, pues este mamífero cuenta con un estómago bastante pequeño en relación con su tamaño y prefiere comer poca comida, varias veces al día.

Respecto al agua ha de estar siempre fresca y limpia, vigilando que en invierno no llegue a temperaturas inferiores a 6 ºC. Un caballo puede beber hasta 55 litros de agua, por lo que es importante que no le falte nunca para no deshidratarse.  Además, puedes cumplimentar su dieta dándole sal en bloques, es buena para sus electrolitos.

Cuidado del espacio

Un caballo necesita vivir en un sitio espacioso. Es un animal claustrofóbico y puede desarrollar ansiedad en un espacio pequeño con poca movilidad. El cuidado de un caballo incluirá asegurarse de que puede moverse todo lo que necesita. Si no tienes otra opción que encerrarlo en un box has de sacar  al animal varias horas al día para que ejercite la musculatura y evitar enfermedades locomotoras o conductas nocivas para su salud.

Higiene y el aseo 

La higiene es uno de los puntos más importantes del cuidado de los caballos. Por un lado, es de vital importancia mantener limpio el establo o el lugar reservado para el animal. Se ha de limpiar frecuentemente para evitar problemas de salud. Del mismo modo debemos remover la cama del caballo todos los días para darle comodidad y que pueda descansar lo suficiente.

Respecto al aseo del caballo, hay que bañarlo después de cada jornada de ejercicio físico con productos suaves para no estropear su pelaje, utilizando agua fría y caliente con el fin de relajar sus músculos. No es bueno ni la falta ni el exceso de higiene para el cuidado del caballo, pues su pelaje se resentirá y puede causarle irritación que a su vez lleve a heridas o falta de pelo en las zonas donde el animal se rasque o muerda. Esta situación le hará más vulnerable ante posibles infecciones.

Cuidado de caballos

Ejercicio físico

Para que un caballo esté bien cuidado y en forma necesita ejercitarse físicamente mínimo una hora cuatro días por semana, aunque lo óptimo sería todos los días. La equitación no es ejercicio para él, sino trabajo. No obstante, es importante remarcar que los equipos deben estar limpios y desinfectados para que, cuando el caballo transpire, el espacio entre la silla y la piel del animal no sea un foco de hongos. 

Veterinario

Aún dando a nuestro caballo los mejores cuidados es posible que enferme, por lo que siempre debemos estar atentos por si necesita una visita del veterinario. Además, es importante revisar su dentadura al menos una vez al año para asegurar su buen estado.

Por otro lado, es posible que un caballo presente algún síntoma o comportamiento que no sepamos identificar. Ante cualquier duda siempre se debe consultar con un especialista.

Cuidado de los cascos

El cuidado de los cascos de un caballo se ha de llevar al día. No deben pasar más de dos meses sin que el herrador recorte los cascos a tu caballo y revise sus herraduras.

Cuidado de caballos

Jubilación de un caballo

Un caballo vive, generalmente, entre 30 y 35 años. Pero durante toda su vida no tendrá el vigor ni la fuerza con la que cuenta durante la primera etapa de la misma. Prestando atención y conociendo a tu caballo, puedes darte cuenta que, con el paso de los años, no es capaz de moverse con tanta soltura ni posee la misma agilidad

Cuando esto ocurra debemos apartar al caballo de las actividades que requieran gran esfuerzo muscular como la equitación para cuidar su salud. La jubilación de cada caballo depende de su personalidad y su estado físico, los hay que prefieren la tranquilidad y les basta con poder pasearse por un prado y los hay que necesitar más actividad física.

En definitiva, los caballos necesitan muchos más cuidados específicos que cualquier mascota que podamos adoptar. Fuera de los cuidados básicos requieren otras atenciones diarias más complejas para mantener la vitalidad y la fortaleza que les caracterizan. Es importante informarse de todas ellas antes de tomar una decisión tan significativa como es adquirir un caballo.

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