La mayoría de animales se ven afectados por los cambios bruscos de temperatura y tardan un tiempo en adaptarse a la nueva sensación térmica. Entender cómo se adaptan los animales a la temperatura dependiendo de la época del año es fundamental para poder ayudar a las mascotas que viven en casa y que sufren estos contrastes.
Los animales suelen ser capaces de regular su temperatura corporal pero no todos lo hacen de la misma manera, para conocer cómo se adaptan los animales a las diferentes temperaturas es necesario saber los dos tipos de regulación que existe:
- Animales endotérmicos. Son los animales cuya temperatura corporal depende del calor que desprenden sus funciones corporales internas, por lo que suelen mantener una temperatura constante la mayor parte del tiempo. Son seres vivos endométricos los mamíferos (los humanos o los gatos) y las aves.
- Animales ectotérmicos. Son aquellos incapaces de generar calor interno. Es muy interesantes como se adaptan estos animales a las temperaturas mediante diversos métodos. Se les suele llamar animales de “sangre fría”, a diferencia de los endotérmicos que tendrían “sangre caliente”. Los ectotérmicos son los anfibios, peces, reptiles e insectos.
como se adaptan los animales a la temperatura
Muchos animales son termosensibles, esto significa que perciben los cambios ambientales con una sensibilidad mayor que el resto de seres vivos. La adaptación a la temperatura de los animales con esta cualidad es difícil, por lo que habrá que ayudarles a que pasen estas época de la mejor manera posible si los tenemos en casa.
Perros
Los perros son probablemente los animales que peor se adaptan a los cambios de temperatura. Saber cómo ayudarlos a mitigar los síntomas de estos cambios les ayudará mucho a sentirse mejor.
- Alergias y resfriados. Surgen sobre todo en invierno y primavera. Los síntomas de la alergia en tu mascota son el picor y las ronchas rojas en la piel. Además, en un entorno de excesiva humedad pueden producirse hongos. Los grandes cambios de temperatura son los causantes de los resfriados, faringitis, rinitis…que deben cuidar bien para que no deriven en neumonía.
- Épocas de muda. Ocurren en otoño y primavera para adecuar su pelaje a las venideras temperaturas. Con un cepillado rutinario el pelo antiguo caerá más rápido y se incentivará la aparición del nuevo. Es un buen ejemplo de cómo ayudar a nuestro animales a adaptarse a las diferentes temperaturas.
- Cansancio y depresión. Los canes también sufren el Síndrome Afectivo Emocional, que aparece con el descenso de horas diarias de luz que puede acarrear cansancio y depresión durante esos meses.
- Falta de apetito. Estos animales saben cómo adaptarse a las temperaturas utilizando ciertas técnicas. En los meses más calurosos suelen realizar menos actividad física, por lo que no necesitan ingerir tanta cantidad de comida. No es ningún problema, simplemente tendrás que asegurarte de proveer a tu mascota de agua fresca en todo momento.
- Altas temperaturas. Durante estos meses también es importante sacar a los perros a la calle las primeras y últimas horas de sol para evitar deshidratación, un golpe de calor, y que sus patitas no se quemen.
- Artrosis. En épocas de lluvia y frío los canes con sensibilidad en las articulaciones sufrirán un poco más. Protegerlos con impermeables y practicar deporte moderado les puede ayudar.
- Parásitos. Las garrapatas, pulgas y mosquitos aparecen, sobre todo, en las estaciones más calurosas. Para evitarlos es conveniente el uso de desparasitantes durante todo el año.
- Cambios horarios. A lo largo del año se dan dos cambios horarios. Las personas nos adaptamos rápidamente a realizar las tareas una hora antes o después. Pero los perros notarán que sus paseos o comidas llegan en momentos distintos. Realiza estos cambios poco a poco para que tu mascota no los sufra intensamente.
Gatos
Al igual que los perros, los gatos sufren alteraciones cuando llegan cambios de temperatura y tienen que saber cómo adaptarse a ellos. Aunque no padecen de un modo tan intenso como los perros, también pueden presentar cambios de humor con la bajada de horas de sol o ingerir más alimento en invierno que en verano.
Por otro lado, tanto el hielo como el calor excesivo del suelo puede quemar o cortar las almohadillas de las patas de los animales, por lo que se han de cuidar mucho. Al igual que su piel durante las estaciones más cálidas.
Tortugas
Las tortugas son animales cuya temperatura del cuerpo está determinada por el ambiente, por eso hibernan durante el invierno y en otoño. En esta época son muy sensibles a los ruidos y a los cambios de luz y de temperatura. Por supuesto, apenas comen durante su letargo.
Caballos
Los caballos, en general, soportan bien los climas fríos. Pero se ha de evitar un exceso de ejercicio físico que caliente al animal y lo enfríe en poco tiempo. Por otro lado, se ha de cuidar muy bien la salud dermatológica de estos animales, ya que su piel es un órgano vital para poder realizar el ejercicio físico diario que necesita.
Peces
Su regulación corporal está determinada por el agua en la que habite. Ayuda a tus peces a soportar las temperaturas frías manteniendo el calor adecuado del agua. Así es como estos animales pueden adaptarse a los cambios de temperatura.
Aves
Durante el invierno, las aves en libertad migran a lugares más calurosos. Las que no lo hacen cuentan con mecanismos para mantener su temperatura interna. Lo más común es que reduzcan su actividad metabólica, ahuequen sus alas e, incluso, suspenden procesos como el latido de su corazón o el ritmo respiratorio. Ayuda a mantener el calor de tu ave si observas estos comportamientos en él.
Arácnidos, escorpiones y reptiles
El hábitat de estas especies ha de protegerse de la humedad y el frío manteniendo la temperatura del terrario de estos animales lo más constante posible. Es de las pocas maneras como se les puede ayudar a adaptarse a las diferentes temperaturas.
A rasgos generales, así es cómo se adaptan los animales a las temperaturas anuales cambiantes. Si a tu mascota le cuesta adecuarse a estas variaciones ambientales, ayúdale para que padezca lo menos posible durante las estaciones más difíciles para ella.